Protección al soldar: equipo necesario
Los soldadores están expuestos a un sinfín de riesgos en el ejercicio de su profesión.
Quemaduras, abrasiones, problemas respiratorios, pérdidas auditivas…
Son algunas de las patologías más frecuentes y características de esta actividad.
Por ello, un equipo de protección para soldar es totalmente necesario para la realización de estos trabajos.
Veamos en qué consiste.
Riesgos de la soldadura
Los trabajos de soldadura y oxicorte emplean herramientas y maquinaria que necesitan equipos de protección al soldar específicos para evitar los riesgos a los que esta actividad está sometida.
Estos son los más habituales:
- Desprendimiento de partículas: Tanto partículas incandescentes como no, pueden ser desprendidas en los trabajos de corte y soldadura.
- Contactos térmicos: Cualquier parte del cuerpo del soldador puede verse afectada por quemaduras debidas al contacto con piezas a temperatura elevada o proyecciones de material fundido. Al mismo tiempo, en operaciones de oxicorte, puede haber peligro de congelación por exposición a gases licuados.
- Radiaciones no ionizantes: Se pueden producir lesiones si no se lleva un equipo de protección personal para soldadura MIG en piel y ojos que eviten las radiaciones ultravioleta o infrarrojas en las operaciones normales en estos trabajos.
- Exposición a sustancias asfixiantes o tóxicas: En este tipo de trabajos se producen vapores metálicos y gases que pueden producir lesiones o afecciones diferentes. Esto es debido a los recubrimientos existentes (cromados, galvanizados, niquelados, etc.) de los metales con los que se trabajan, que al quemarse, desprenden ciertos óxidos nocivos.
Medidas de protección al soldar
Este tipo de trabajos no solo conllevan los riesgos específicos vistos anteriormente propios de esta actividad, sino que además, el soldador es muy frecuente que realice su acción en obras, por lo que además de los equipos de protección personal de soldadura, deben llevar otros EPI que protejan de los posibles accidentes que puedan surgir en estos ambientes.
Los equipos de protección de soldadura más frecuentes son:
Guantes de soldadura
El guante de soldar suele ser del denominado tipo «mosquetero», cubriendo manos y parte de los antebrazos.
En función del tipo de soldaduras a realizar pueden ser de cuero grueso, con costuras de kevlar o de asbesto.
Protegen de abrasiones, quemaduras y cortes.
Tapones para los oídos
Los protectores auditivos para soldadura suelen estar fabricados en hule, espuma o silicona.
Suelen ser blandos y moldeables, para ajustarse perfectamente al oído. Estos elementos tienen la capacidad de reducir el ruido en 15 dB.
Máscaras de soldar
La máscara de soldador debe proteger contra el arco eléctrico, las chispas incandescentes y la proyección de partículas. Protegen la cabeza y el cuello y llevan unas lentes capaces de filtrar los rayos ultravioleta e infrarrojos.
Botas de Seguridad
Las botas de soldador deben ser aislantes y exentas de ojales, broches o partes metálicas, excepto la puntera que debe estar cubierta por un material aislante.
Ropa de seguridad
Además de todo lo anterior, para la protección del cuerpo es aconsejable el uso de manguillas, coleto y polainas fabricadas con cuero de descarne.
Todos estos accesorios protegen de punciones, chispas, cortes y abrasiones.
La protección al soldar es totalmente necesaria en este tipo de trabajos, ya que estos profesionales están muy expuestos a ciertos riesgos derivados de esta actividad.
Una buena selección de estos elementos y una preparación adecuada, son fundamentales para prevenir los accidentes laborales de un soldador.