Evitar accidentes con la electricidad

Recomendaciones para evitar accidentes con la electricidad si eres profesional

Aunque los accidentes eléctricos para un profesional que trabaja en este sector no suelen ser frecuentes, sí suelen ser los más graves, ya que pueden llegar, incluso, a poder causar la muerte o a producir lesiones que pueden cambiar la vida del que los padece.

Para evitar todo esto, hay ciertas recomendaciones para evitar accidentes con la electricidad y poder realizar estos trabajos de la forma más segura posible. Veamos cuáles son.

Riesgos de accidentes eléctricos

Son susceptibles de que puedan producirse en aquellos trabajos que puedan originar accidentes con cables eléctricos o con la manipulación de algún aparato que se alimente con este tipo de energía. Pueden originarse por 3 causas:

1. Por manipulación de instalaciones antiguas: Tanto el deterioro como el envejecimiento de instalaciones eléctricas son unos de los problemas más destacados. Un defecto de revisiones periódicas implica una eliminación de la capa aislante en los materiales y el riesgo de descarga eléctrica aumenta.
2. Poca seguridad en las instalaciones: Los fallos en las medidas de seguridad de riesgo eléctrico contribuyen a subir considerablemente las estadísticas. La revisión periódica de los protocolos según las normativas vigentes, disminuyen considerablemente la casuística.
3. Negligencias humanas: Falta de previsión y análisis, mal uso de los elementos de protección, exceso de confianza… Son lamentablemente causas muy comunes en accidentes eléctricos. Otra característica más común es el no tener en cuenta unas condiciones climáticas adversas a la hora de la realización de este tipo de trabajos.

Medidas de seguridad ante un riesgo eléctrico

Son dos las recomendaciones para evitar accidentes con la electricidad más efectivas. La primera de ellas son las llamadas «5 reglas de oro» para realizar trabajos sin tensión:

• Desconectar la alimentación de la línea, aparato o máquina donde se vayan a efectuar los trabajos.
• Bloqueo de los circuitos con una posterior señalización, de esta forma se impide que un tercero pueda volver a realizar la conexión a la red eléctrica.
• Comprobar con las instrucciones del fabricante y con los medios adecuados la ausencia total de tensión.
• Asegurarse de realizar un cortocircuito y de poner a tierra la instalación.
• Señalar con medidas de seguridad como conos, vallas y demás elementos las zonas de trabajo.

Por otro lado, la segunda consiste en usar los equipos de protección adecuados o EPI para proteger nuestro cuerpo de las posibles descargas eléctricas que puedan ocasionarse. Los más recomendados son:

• • • Calzado de seguridad sin ningún tipo de elementos metálicos.
    • Ropa que nos proteja de los arcos eléctricos.
    • Casco de seguridad con su pantalla facial correspondiente.
    • Guantes aislantes, mecánicos e ignífugos.

Estos elementos deben elegirse en función de la tensión de la instalación donde vayan a realizarse los trabajos.

Todas estas recomendaciones para evitar accidentes con la electricidad son necesarias para preservar la salud de los profesionales que se encargan de realizar este tipo de trabajos.

Es conveniente recordar, que este tipo de instalaciones deben tener un correcto mantenimiento y cumplir la normativa vigente para minimizar todo lo posible los posibles riesgos que puedan tenerse en su manipulación.

Y por supuesto, no dejar nunca de utilizar tanto el material como los equipos de protección adecuados.